30 de enero de 2012

Te quiero.

Parece que todavía no entiendes, no alcanzas a hacerte una mínima idea de lo que yo siento por ti...

¿No entiendes que pienso en ti desde que me levanto hasta que me acuesto?
¿No entiendes que eres la persona con la que me has hecho sentir realmente querida?
¿No entiendes tampoco que me pongo triste cuando no puedo hablar contigo un día?
¿No comprendes la estúpida sonrisa que se dibuja en mi cara cuando miro el teléfono sonando y veo tu número?


Parece que no.

Pues a ver si esto te ayuda a quitarte algunas ideas tontas que pasan por tu cabeza:


Cada vez que hablas conmigo,  me olvido de todo lo malo que me pasa en la vida...y noto cómo el calor recorre mi cuerpo, no es algo a lo que estoy acostumbrada.

Cada vez que me dices ‘’te quiero’’, el mundo se vuelve el lugar más maravilloso del mundo, da igual lo que les pase a los demás, yo soy la entidad más feliz sobre la Tierra en ese momento.

Quizás con alguna otra persona me planteara el tener una relación que durase indefinidamente, pero parece que no te ha llegado a la cabeza que yo nunca he sentido esto por nadie: Asúmelo, no me vas a apartar de tu lado.

Odio que las personas se acerquen a mí, discuto con mi familia el 98% de mis horas diurnas, apenas tengo en quien confiar... Cualquiera al que le cuente esto piensa que mi vida es una mierda, pero yo enseguida le corto... Mi vida no es una mierda, es una vida que no cambiaría por nada del mundo, JAMÁS. ¿Sabes por qué? Porque en ella estás tú.

Te quiero, te amo, te adoro, eres de las mejores cosas que me han pasado en la vida, y no quiero separarme nunca de ti.

¿Todavía no lo entiendes?

Te quiero

Por favor, nunca te vayas de mi lado...

19 de enero de 2012

Indiferencia . . .

A cada cerdo, le llega su San Martín. Pagarás todo lo hecho, pagarás las consecuencias de tus mentiras.
Y tú me hablabas de arrepentimiento...
Jamás volveré a estar tan ciega, ni volveré a mostrar mi debilidad.
Y aunque tu lengua venenosa siga esparciendo entre la escoria mis errores, no importa ni importará nunca, quién esté libre de pecado que lance la última piedra.
Algún día la conciencia se hará un hueco en ti, algún día el remordimiento te doblegará y ahí estará tu pasado para escupirte.
Púdrete.
...Indiferencia.



— “Mi visión nunca se había nublado como ahora. No supe ver la verdad que había dentro de tu corazón. [...] Mis ojos me engañaron. Que nunca vuelva... - Levantó la piedra y se clavó el canto puntiagudo en un ojo. Su grito resonó entre las rocas, [...] .- Que nunca vuelva a estar tan ciego. [...] - Caiga sobre ti una maldición. Que tu propio nombre se vuelva en tu contra, y que nunca encuentres la paz. [...]”

13 de enero de 2012

Un suspiro.

Recuerda cómo tocar la guitarra, despacio, pausadamente y de vez en cuando, observando el paisaje por la ventana resquebrajada. Suéltala y toca mi alma de la misma manera, sin romperla. Mis ojos no están quebrados como ese cristal.

La manera que tienen mis dedos de entrelazarse con los tuyos es sólo mía. Caigo en mi propio recuerdo, en mi ensoñación. No todo está tan mal aquí dentro.

La respiración es agobiante, agitada quizá, pero veo de fondo un pájaro volar. ¿Cómo se siente? Puede que sea inalcanzable.

Una hoja otoñal cae sobre mi rostro, deshaciéndose al segundo. Estiro la mano, poniendo la palma hacia arriba y notando los copos de nieve caer. Se condensan en la piel, extraño.

Mis ojos están muertos, carentes de sentimiento. Un alma vacía que suspira y unos labios deseosos de decir cualquier palabra. Pero ya no, se ha ido todo, esfumado, olvidado...

La cama es mi único lugar seguro aquí. Los dedos dibujan una silueta, bastante peculiar y que me recuerda algo... o a alguien quizá. Es como si fuera el olvido, pero a la vez no lo es. Es humo, pero se convierte en realidad.

El placer del dolor, es tan banal, que me resulta irónico referirme a él, siquiera mencionarlo.
Una bonita emoción asoma en mi mente. Te quiero. Y este sitio está mejor sin ti.

8 de enero de 2012

Está claro.

Estoy empezando a entender que quizá todo lo que haya hecho en el pasado año, no ha tenido mucho significado.
Comprendo que mi vida ahora mismo no valga lo que quizá pueda valer.
Que soy una estúpida al engañarme a mí misma con falsas promesas.
Los príncipes no existen.
Siento que me han quedado millones de cosas por hacer.
Nada es para siempre.
No volverá a dar aliento a mi alma.
No soy valiente.
Me ilusiono por cosas insignificantes, para luego darlas forma y transformarlas en algo más grande.
Tengo demasiados sentimientos acumulados, tantos que la gente no los sabe.
Me importas.
Me alegro de haber conocido a tantas personas... y el haber cometido errores con ellas.
Que echo de menos todo.
Que las canciones que escucho me recuerdan a todas las personas que se fueron de mi lado.
Tengo ganas de llorar.
Dices muchas mentiras, pero te creo cuando me miras a los ojos.
Quiero estar encerrada en mi cuarto, debajo de esas sábanas y no salir nunca.
No puedo remediar nada.

2 de enero de 2012

Un recuerdo.

Realmente no me di cuenta de a qué hora terminó el 2011, sinceramente fue todo muy inesperado... me quedé totalmente dormida quizá esperando la llamada de alguien en mi móvil o incluso en el teléfono. Pero nada, me alegró saber que los amigos están para esto. Cuando abrí los ojos, era la una de la madrugada y estaba en el salón, escuchando la típica música de la televisión de hace cuatro años o más.
También recuerdo meterme en el cama desesperanzada y volver a levantarme para entrar al ordenador y ver en el messenger felicitaciones de tres personas contadas. Realmente me entraron ganas de llorar.
Estoy perdiendo a una amiga... vaya entrada de año. Que sus excusas sirvan para no estar conmigo me las tomo bien, pero en el fondo duelen, y más que siempre tenga que estar yo detrás de ella.
Mi '' mejor amigo '' ahora mismo, es lo que menos me importa, voy a tener que pasar página porque no se merece el cariño que le brindé en su día.
No he conseguido nada en este año, sólo llevarme cada día broncas y caídas, una tras otra. A cada día que pasaba parecía que el cielo no quería que me levantara y así fue, llegó un día en el que no me moví de la cama, con ganas de tirarlo todo.
También reconozco que con mis ataques, he roto bastantes cosas... sin querer evidentemente, pero las personas externas no lo ven así. He pegado a bastante gente a causa de la emoción del momento, la tristeza me embriagaba por completo. En serio, lo dije esa vez y lo digo ahora, lo siento.
Me siguen doliendo los ojos de tanto llorar, porque no he parado. Suerte que hoy pude quedarme en casa porque la academia cerraba.
No sé qué pensar del año que ha pasado, pero estoy viendo, que el que ha entrado no está siendo mucho mejor. No creo que sea tan difícil pedir que haya una persona a mi lado, alguien a quien de verdad le importe y no me deje abandonada por otra cosa, otro motivo, otro lugar... no es tan difícil de realizar.
Mi propósito para el 2012 es tener a alguien así. Quizá le tenga, pero ahora mismo, me da hasta miedo reconocerlo.